Pedro Sánchez se viene arriba en la cumbre liberal de Davos y da un discurso sobre la desigualdad. La noticia es que lo hace en inglés.
Sánchez dijo cosas como que "La economía no es un fin en sí mismo, debe estar al servicio de las personas" o que "Las desigualdades detruyen nuestras sociedades".
Todo muy contracorriente, muy valiente, si bien la sala estaba medio vacía, pero lo más desconcertante es que al tiempo que las pronunciaba, el Open Arms permaneece bloqueado en Barcelona mientras el Mediterráneo especula con el futuro de un centenar de víctimas de la desigualdad que vagan a la deriva.
No sé por qué me viene a la cabeza la anécdota de nuestro compañero de Grupo de Expertos, el experto nº 7, que a la hora de describir su perfil en las webs de contactos se describe a sí mimo como portador de apolínea apostura, gallardía y pizpiretismo, y a la hora de la verdad sus citas se encuentran que su apostura no llega a los 130 cms (con tacones), que su gallardía está un poco contrahecha y que es solo es portador del anillo (de comunión) y de una halitosis galopante. Y mira que se lo tenemos dicho, "Experto nº 7, decir cualquier cosa no vale para que te den votos en la red". Creo que ahora no se dicen votos, se dicen "likes". Pero, ¿por qué les estoy contando esto? Bueno, la cuestión es que he cubierto el número de palabras del artículo. Si me disculpan, me voy a tomar un café con la satisfacción del deber cumplido.
Hucha de likes Imagen DasWortgewand g+ |
Comentarios