Pablo Casado ofrece a una desesperada May una solución factible para el brexit
La primera ministra desesperada por convencer a los
diputados de la cámara en su enésimo intento, ha consultado a su círculo de expertos, quienes le han comunicado que lamentablemente ya han utilizado todos los argumentos habidos y por haber que existen en el mundo, incluídos los argumentos en lenguas muertas, y que lo único que resta a estas alturas
sería ponerles a los diputados burundanga en el fish and chips de
media mañana.
Como May se ha mostrado decepcionada con ellos, el círculo de expertos ha procedido a quemarse colectivamente a lo bonzo, sin perder en ningún momento la flema ni la formación circular que les caracteriza y da nombre, no se sabe si impelidos a hacerlo por el famoso honor inglés o si porque era la única manera que tenían de que May dejara de darles la turra.
Así pues, May se hubiera quedado compuesta y sin círculo, sino
fuera porque Pablo Casado, que sabe lo que es sentir el nacionalismo de forma extrema, se ha ofrecido a prestarle nuestra joya de la corona, el artículo
155, con el que May podría por fin conseguir controlar a la
cámara sin ningún tipo de problema. May le ha mirado durante un instante sin dar crédito, ha suspirado aliviada, ha dado un sorbo a su taza de te y ha sonreído agradecida a Pablo Casado antes de responderle: "¡Be fucking great Pablo, pero Gibraltar no es negociable". ¡Mecachís!
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| Joven hasta la gaita del brexit Foto Sharonang |
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