Reino Unido sale al rescate de sus cuatro mayores bancos
El Reino Unido ha dejado esta mañana, a primera hora, su domicilio, sin ningún tipo de escolta ni otra protección que no sea la de su bombín y su paraguas, y, siguiendo las instrucciones, se ha dirigido a Picadilly Circus. Una vez allí ha levantando la tapa de una alcantarilla y ha depositado en su interior una maleta con 44.000 millones de euros no marcados, discontínuos y en billetes de 5 euros.
El Reino Unido se encuentra ahora en su casa (las islas británicas) al borde del colapso, comiéndose las uñas (¿los Reinos Unidos tienen uñas?, en caso contrario entiéndase como un retruécano o, en su defecto, como una sinécdoque) al lado del teléfono, a la espera de saber si el eje del mal libera a sus querídisimos cuatro hijos mayores Lloyd, Blarclays, HBOS y Royal Bank of Scotland.
Como quiera que sea y mientras tanto, Grupo de Expertos ruega una oración por la serenidad de sus cuatro almas (¿los bancos tienen almas?) y, muy especialmente, por la de los miles de fieles que tienen depositada su "fe", "su esperanza" y "su caridad" en ellos y que tantas noches llevan sin poder dormir enfermos de preocupación. Si no fuera por el transido dolor, cuanta la belleza y que de profundis lirismo impregna el tan férreo como indisoluble vínculo que les une ¿verdad?. Si los primeros decidieran tirarse al vacío, sus fieles irían detrás sin dudarlo. Es ese tipo de belleza desgarradora que podemos sentir cuando el cocodrilo se fagocita a ese joven e indefenso impala en el National Geographic.
Canción: "Dirty Money and Filthy Love" (The Dalloways)
El Reino Unido se encuentra ahora en su casa (las islas británicas) al borde del colapso, comiéndose las uñas (¿los Reinos Unidos tienen uñas?, en caso contrario entiéndase como un retruécano o, en su defecto, como una sinécdoque) al lado del teléfono, a la espera de saber si el eje del mal libera a sus querídisimos cuatro hijos mayores Lloyd, Blarclays, HBOS y Royal Bank of Scotland.
Como quiera que sea y mientras tanto, Grupo de Expertos ruega una oración por la serenidad de sus cuatro almas (¿los bancos tienen almas?) y, muy especialmente, por la de los miles de fieles que tienen depositada su "fe", "su esperanza" y "su caridad" en ellos y que tantas noches llevan sin poder dormir enfermos de preocupación. Si no fuera por el transido dolor, cuanta la belleza y que de profundis lirismo impregna el tan férreo como indisoluble vínculo que les une ¿verdad?. Si los primeros decidieran tirarse al vacío, sus fieles irían detrás sin dudarlo. Es ese tipo de belleza desgarradora que podemos sentir cuando el cocodrilo se fagocita a ese joven e indefenso impala en el National Geographic.
Canción: "Dirty Money and Filthy Love" (The Dalloways)
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